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CONGRESO MEDIEVAL Gallardo (Vox) reivindica el medievo como pilar de la identidad nacional

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Valladolid. El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo (Vox), ha reivindicado la Edad Media como «una época de luz» en la que «hunde sus raíces» España y en la que se «se forjó gran parte de la identidad nacional».

«Quienes anhelen destruir la unidad nacional de España tendrán a la Edad Media como enemiga, porque es en este momento cuando los reinos de Castilla y de León tuvieron su mayor esplendor», ha afirmado en la inauguración del Congreso «La España medieval: un mundo de fronteras territoriales, religiosas y culturales que se ha celebrado este jueves en las Cortes autonómicas.

«España se construyó luchando por la libertad, ampliando sus fronteras hacia el sur, expandiendo los horizontes del cristianismo frente al Islam que había invadido la Península Ibérica y eso es importante tenerlo en cuenta», ha asegurado.

García-Gallardo ha reflexionado sobre la consideración extendida de que la Edad Media es un período oscuro frente a la Edad Antigua o la Modernidad y ha aprovechado para criticar como, desde el punto de vista de la política, se aprecia «un sesgo» en la interpretación de los hechos del siglo XX o de la Edad Media.

El vicepresidente ha rechazado al visión de los que quieren «ser más modernos que la propia modernidad» que utilizan el argumento de que cuando «quieren hacer un barbaridad» utilizan frases del tipo «en pleno siglo XXI cómo va a ser posible» y que, según él, ya hacían los totalitarismos cuyo «líderes dictatoriales siempre apelaban a la modernidad, a su última época».

«Vivimos en una gran época de grandes avances sociales, pero quién olvida la tradición está condenado al fracaso y a la irrelevancia, porque han sido las sociedades tradicionales las que siempre han prosperado más», ha aseverado, para señalar los casos de antigua Roma, la Inglaterra de los siglos XVII y XVIII y o los siglos XII y XII en los territorios que hoy son Castilla y León.

Gallardo ha asegurado que en esos años se construyeron «las catedrales más bellas de la Península» – Burgos, León, Palencia, Salamanca y Zamora – en homenaje a Dios y ha aprovechado para apuntar que los «que imponen un estilo brutalista que luego no va a ser admirado por las futuras generaciones, desprecian todo lo que se hizo entonces».

También ha calificado el papel de la Iglesia Católica como «vanguardista», ya que favorecía la expansión del conocimiento a través de los monasterios y las universidades, como las de Salamanca y Palencia, así como ha subrayado el papel de las primeras Cortes democráticas en San Isidoro, León, donde por primera vez sucedió que «los aspectos que afectaban a todos debían ser decididos por todos».

El vicepresidente autonómico ha asegurado que «es una buena noticia que se sigan celebrando congresos como este en un espacio de libertad, en el que todos pueden expresar sus ideas sin ningún miedo a la censura o a la cultura de la cancelación», una idea que también han repetido el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, o el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, en sus intervenciones. EFE